«Dosimetría en radioprotección pediátrica: Consideraciones especiales»
MsC. Omar Arias Curatolo
CEO SEROFCA / Profesor Universidad Central de Venezuela
La dosimetría en radioprotección pediátrica es un campo de gran importancia y relevancia, ya que los niños son considerados una población sensible a los efectos de la radiación. A lo largo de este ensayo, exploramos las consideraciones especiales en dosimetría para la radioprotección pediátrica, centrándonos en las diferencias anatómicas y fisiológicas que afectan la estimación de la dosis.
En primer lugar, es fundamental comprender que los niños presentan diferencias anatómicas con respecto a los adultos. Su tamaño y forma corporal son distintos, lo que implica que la distribución de la radiación en su organismo también varía. Por ejemplo, el cuerpo de un niño tiene una mayor proporción de tejido blando y órganos en desarrollo en comparación con los adultos. Esta diferencia anatómica puede tener un impacto significativo en la forma en que se estima y se calcula la dosis de radiación.
Además de las diferencias anatómicas, los niños también presentan diferencias fisiológicas que deben ser consideradas en la dosimetría pediátrica. Los niños tienen una mayor tasa metabólica y un mayor recambio celular en comparación con los adultos. Esto significa que su sensibilidad a los efectos de la radiación puede ser diferente, y sus tejidos en crecimiento y desarrollo son más susceptibles a los efectos nocivos de la radiación ionizante. Por lo tanto, es esencial tener en cuenta estas diferencias fisiológicas al estimar la dosis y evaluar los riesgos radiológicos en la población pediátrica.
En cuanto a la estimación de la dosis en radioprotección pediátrica, existen diferentes enfoques y técnicas que se utilizan para adaptar la dosimetría convencional de adultos a niños. Uno de los métodos más comunes es la utilización de factores de corrección o coeficientes específicos para tener en cuenta las diferencias anatómicas y fisiológicas. Estos factores de corrección se basan en datos y modelos que consideran el tamaño y la composición corporal de los niños.
Además, la dosimetría en radioprotección pediátrica también debe considerar el tipo de examen radiológico al que se somete el niño. Algunos procedimientos, como las radiografías dentales o las radiografías de tórax, pueden tener una exposición relativamente baja, mientras que otros, como las tomografías computarizadas (TC) o los tratamientos de radioterapia, pueden implicar una mayor exposición a la radiación. En estos casos, es necesario utilizar técnicas y algoritmos de dosimetría más avanzados para estimar con precisión la dosis absorbida en los diferentes tejidos y órganos del niño.
Otro aspecto importante en la dosimetría pediátrica es la optimización de las dosis en los procedimientos radiológicos. Debido a la mayor sensibilidad de los niños a la radiación, es fundamental utilizar protocolos de imagen adaptados a su edad y tamaño, con el objetivo de reducir la dosis sin comprometer la calidad de la imagen. La implementación de técnicas de reducción de dosis, como la modulación de la dosis o el uso de técnicas de reconstrucción iterativa en tomografía computarizada, puede ser especialmente beneficiosa en el contexto pediátrico.
Asimismo, es esencial fomentar la conciencia y la educación en radioprotección tanto en los profesionales de la salud como en los padres y cuidadores de los niños. Los profesionales deben recibir una formación especializada en radioprotección pediátrica, que incluya conocimientos sobre las dosis apropiadas, la selección de técnicas de imagen y el uso de dispositivos de protección. Por otro lado, los padres y cuidadores deben recibir información clara y comprensible sobre los beneficios y los riesgos de los procedimientos radiológicos, para que puedan tomar decisiones informadas y participar activamente en la protección de sus hijos.
En conclusión, la dosimetría en radioprotección pediátrica requiere consideraciones especiales debido a las diferencias anatómicas y fisiológicas de los niños en comparación con los adultos. La estimación de la dosis en la población pediátrica debe basarse en factores de corrección y técnicas específicas que tengan en cuenta estas diferencias. Además, es esencial optimizar las dosis en los procedimientos radiológicos, utilizando protocolos adaptados y técnicas de reducción de dosis. La educación y la conciencia en radioprotección pediátrica son fundamentales para garantizar la seguridad y el bienestar de los niños en los entornos radiológicos.
