Inteligencia aumentada en medicina
Invitados: Dr. Miguel Martin, Dr. Rafael Martin
En esta oportunidad estaremos conversando con los Drs. Miguel y Rafael Martin invitados en nuestro espacio aprendiendo + sobre inteligencia aumentada en medicina.
El Dr. Rafael Martin explica que la inteligencia aumentada puede definirse como el resultado de incrementar o potenciar la inteligencia humana a través de la interacción con sistemas que poseen inteligencia artificial. Señala que si bien existen muchos usos para la inteligencia aumentada, la definición que utilizarán para esta presentación es que es una herramienta para mejorar las capacidades físicas y cognitivas del ser humano. La inteligencia artificial puede verse como una herramienta para acelerar la evolución y expansión de las capacidades cognitivas humanas. Como su nombre lo indica, la inteligencia artificial estimula y mejora las capacidades cognitivas del cerebro humano. La presentación señala que no está claro si el cerebro ha terminado su evolución, pero se han observado diferencias entre generaciones en el uso de diversas herramientas, y la inteligencia artificial es sin duda una de ellas. El uso de la inteligencia artificial ha tenido y seguirá teniendo un profundo efecto en la forma en que funciona el cerebro. Uno de los beneficios inmediatos de la inteligencia artificial es su capacidad para ayudar en la toma de decisiones. Esta herramienta puede ayudarnos a resolver diversos problemas, tomar decisiones y tomar decisiones en un período de tiempo más corto. Diariamente, la presencia de inteligencia artificial se puede observar en prácticamente todos los ámbitos de la actividad humana, desde los negocios hasta la atención médica. A medida que la inteligencia artificial permanezca en el corto plazo, se producirán cambios de gran alcance de forma gradual a medida que esta tecnología continúe evolucionando y madurando, y los humanos dependerán menos de ella como herramienta. Si podemos llegar a un punto en el que realmente podamos aumentar nuestras habilidades sin depender de la inteligencia artificial, habremos desbloqueado todo su potencial.
El Instituto de Inteligencia se fundó en 2021 y aquí tenemos los dos pilares fundamentales del instituto: Sham Kakade y Bernardo Sabatini. Recientemente se ha unido al instituto el Dr. Kepler, quien está estrechamente relacionado con el Dr. Kanaka Rayan, quien es un líder en el uso de Inteligencia Artificial y Aprendizaje Automático para estudiar el cerebro. Su enfoque es proporcionar importantes puntos de entrada y retroalimentación en el tema, que es el aprendizaje, la memoria y la toma de decisiones. El programa del Dr. Rayan se centra en utilizar el cerebro como modelo para desarrollar sistemas, pero al mismo tiempo, el desarrollo del sistema permite modelar el funcionamiento del cerebro, convirtiéndolo en un proceso de investigación cíclico. La iniciativa también se considera una de las que más rápido crece y ya se ha implementado en Harvard, el Instituto de Tecnología de Massachusetts y otras universidades. Sin embargo, Next Level of the lab solo se encuentra en MIT. El enfoque de la iniciativa es aplicar la inteligencia artificial a diversos campos, incluida la medicina, la tecnología y la educación. La evolución de la inteligencia artificial en la humanidad se considera una revolución y no solo una transición como en el pasado, ya que se ve como una transformación de todas las áreas. Next Level of the lab es una extensión de este enfoque y tiene como objetivo mejorar las capacidades humanas utilizando la inteligencia artificial como base. La capacidad de mejorar permanentemente las capacidades humanas es un tema clave en el estudio.
La idea fundamental es que los humanos están expuestos a sistemas de IA, lo que conduce a una interacción que puede reducir la carga de trabajo de los humanos. Esta interacción tiene aspectos tanto fisiológicos como computacionales. Un estudio de 2017 mostró que se esperaba que el peso de la IA en el trabajo disminuyera en el futuro, con una progresión proyectada hacia un equilibrio aproximado de porcentajes para cada uno. El estudio había pronosticado que la proporción de tiempo dedicado a actividades laborales por humanos y máquinas convergería en un equilibrio aproximadamente igual para el año 2017. Sin embargo, la tendencia actual ha mostrado que el porcentaje de tiempo dedicado a actividades basadas en humanos ha disminuido, mientras que la proporción de tiempo dedicado a actividades basadas en máquinas ha aumentado. Señala que el papel principal de los humanos en estos entornos es la supervisión o el control, lo que les permite enfocarse en tareas de mayor nivel mientras las máquinas manejan tareas rutinarias y repetitivas.
El orador analiza el uso de la inteligencia artificial en diversas industrias, incluida la atención médica. Argumentan que los humanos no siempre son capaces de manejar tareas complejas y necesitan tecnología que los asista. El orador afirma que este ha sido el caso históricamente, y señala casos pasados en los que los avances tecnológicos llevaron a problemas sociales como el desplazamiento de puestos de trabajo. Luego citan un ejemplo de fabricantes japoneses que introdujeron tecnología robótica en la industria automotriz en la década de 1980, causando una crisis en el control de calidad en los EE. UU., donde los fabricantes de automóviles no eran tan competentes en el uso de estas máquinas. A pesar de esto, la introducción de AI en el cuidado de la salud puede aumentar la atención al paciente y beneficiar a la industria en general, según el orador.
Discuten las capacidades de las máquinas, específicamente en lo que respecta a cómo se pueden utilizar para aumentar la inteligencia humana en el campo de la medicina. El orador enfatiza que el miedo a la inteligencia artificial debe reemplazarse por una perspectiva positiva, ya que la IA puede verse como una aliada en la búsqueda de avances médicos. Además, el orador analiza el largo historial de relaciones humano-instrumentales, incluido el uso de animales como caballos y el desarrollo de transporte y herramientas. El automóvil y la maquinaria en las industrias de hoy son ejemplos de cómo los humanos han utilizado la tecnología para aumentar sus capacidades. También se analiza el uso de dispositivos e instrumentos para expandir los sentidos humanos, desde telescopios hasta técnicas espectroscópicas en laboratorios. Finalmente, también se aborda el manejo y las operaciones de grandes volúmenes de datos que los cerebros humanos actuales no pueden administrar. En general, el orador enfatiza la importancia de adoptar la tecnología para continuar ampliando los límites de la inteligencia humana y los avances en la medicina.
Explica el concepto del trastorno del espectro autista y su posible conexión con la inteligencia artificial. El orador señala que ha habido un aumento en la incidencia del trastorno del espectro autista en los últimos años, lo que ha provocado una reevaluación del problema. Luego, el orador pasa a discutir el entorno social y humano, donde el uso de dispositivos inteligentes como los teléfonos inteligentes puede ser un puente entre la interacción humana y la inteligencia artificial. Sin embargo, el orador señala que los investigadores que trabajan en el tema han reconocido que el desarrollo de la inteligencia artificial ha tenido un impacto significativo en la forma en que se percibe el trastorno del espectro autista y plantea importantes preguntas sobre su papel en la configuración de la mente humana. El orador profundiza en el caso específico de Julie Coach en el evento «Learns», donde Coach discutió la idea de que el autismo puede representar un cambio evolutivo en la mente humana y que los cerebros asociados con el autismo son capaces de manejar grandes números y realizar cálculos complejos a una escala similar a la de una máquina. Sin embargo, el orador enfatiza que este no es el único aspecto del autismo y que es importante considerar todo el espectro del trastorno al explorar su relación con la inteligencia artificial.
El tema del acceso a recursos informativos para niños, como teléfonos móviles y la red de comunicación, puede provocar un cambio en la forma en que el niño autista interactúa con su entorno. Además, el video menciona el problema de la comunicación y cómo puede verse afectado por el uso de teléfonos y otras tecnologías. Por último, el video discute los detalles relacionados con el uso de teléfonos inteligentes por parte de niños con y sin autismo.
El orador analiza un experimento que involucra una cadena de flujo de información.
El experimento compara tres tipos diferentes de personas, autistas, no autistas y aquellos que se encuentran en algún punto intermedio, y mide cuánta información se puede recordar y registrar en función de sus posiciones en la cadena. Los resultados muestran que no hay una diferencia significativa en la cantidad de información recordada entre autistas y no autistas en forma pura. Sin embargo, las personas del grupo de mezcla, que eran una mezcla de autistas y no autistas, se desempeñaron mejor en términos de recuerdo de información. El orador sugiere que tal vez esto se deba a que los autistas son mejores transmitiendo información que los no autistas, lo que podría explicar por qué pudieron recordar más información.
El Dr. Rafael M. analiza la efectividad de varias herramientas, específicamente la pantalla de tiempo en dispositivos móviles, para interactuar con sistemas de inteligencia artificial.
La discusión se centra en los niños, que están expuestos a más de tres horas de tiempo de pantalla diario en sus dispositivos móviles. El orador utiliza el Cuestionario de Comunicación Social (SCQ) para medir la capacidad de los niños para exhibir características asociadas con el espectro autista. El SCQ es un cuestionario que consta de 40 preguntas simples de sí o no, que solo toma 10 minutos en administrar. Es válido para personas con una edad mental de 2 años o más, y se probó en 308 niños de 4 a 6 años, que formaban parte de un grupo de control. Los resultados mostraron que el 31% de los niños examinados presentaban características asociadas con el espectro autista, como resultado de la exposición a dispositivos móviles. El orador plantea el problema de la dependencia excesiva de la tecnología y la necesidad de que los padres, maestros y profesionales estén al tanto y sean cautelosos sobre el impacto del tiempo de pantalla en los niños.
Luego, el orador comenta sobre el uso de colores como indicadores de un puntaje específico de SSD que está por encima o por debajo de cierto umbral. Según el orador, la distribución en el histograma apunta a un cierto número de niños dentro de la prueba que son similares en comportamiento a aquellos que pertenecían a un espectro específico. Sin embargo, el orador señala que el uso de indicadores de color es limitado y que otros estudios deben continuarse para sacar conclusiones. El orador menciona un estudio realizado en Francia que consideró el tiempo de exposición a tecnologías como televisión, computadoras, tabletas y teléfonos inteligentes como posibles factores de riesgo de trauma del desarrollo infantil temprano. El estudio concluyó que la exposición global a estos medios puede afectar significativamente el desarrollo cognitivo de un niño en las primeras etapas de la vida.
Finalmente el Dr. Rafael M. enfatiza que el tema del autismo está muy relacionado con la inteligencia aumentada.
Para observar el conversatorio ingresar en el siguiente enlace: